3 de septiembre de 2017

La lista de espera

Cuando se nos antoja algo parece que tiene que ser ya o no lo haremos nunca más. Así nos han educado en base al consumismo. Te crean la necesidad y aumenta tu ansiedad por tenerlo ya aunque no lo necesites.

El tatuaje es una artesanía y cualquier tatuador que se precie y se organice el trabajo de manera moderada, por su bien y por el de sus clientes, va a tener lista de espera. Ya sea de un mes o de un año pero si realmente estás valorando tatuarte con él por su trabajo, merecerá la pena esperar.

Nos ha ocurrido muchas veces que las personas que vienen a pedir cita la pidan con fecha concreta o pensando que va a ser para la semana que viene. Cuando les decimos que tendrán que esperar unos meses ponen cara de asombro. Es ese instante en el que la cara de asombro la pongo yo al ver la suya.


Todos sabemos que existen estudios de "batalleo" en los que hay varios tatuadores y es muy probable que pilles a alguno libre y te lo haga en el momento. Es otro modelo de negocio. No hay tanto trato personal ni seguimiento al cliente. Es hola y adiós. Y si tienes algún problema para eso está el médico.

Nosotros nos sentamos con el cliente, nos reservamos un día por semana para preparar diseños grandes, no aglutinamos más de dos sesiones por día (también tenemos vida) y nos gusta que la gente que viene nos valore por nuestro trabajo y sepan esperar. Eso dice mucho de ellos y de nuestra labor.

Otro "problema" son las franquicias de tatuaje. Prometen precios bajos, buenos resultados y dinamitan el mercado. Debido a ello la gente les toma de referencia y todo les parece caro sin valorar lo esencial que es el resultado de la pieza.

Habitualmente en esos estudios se busca dinero rápido, notoriedad de la manera que sea y suelen trabajar personas que están cogiendo bagaje de cara a su carrera profesional y en cuanto tienen tirón, vuelan.

De ahí que entrecomille la palabra problemas: puede ser un problema para el cliente si sus espectativas no son realistas, pero es beneficioso para el tatuador nobel que esta conformando su book. Es un problema para el resto de estudios consolidados porque una gran parte de público solo mira el dinero y regatean como en un mercadillo. Es una ventaja para quitarse trabajos pequeños que tatuadores con experiencia no quieren realizar. Es un inconveniente porque a largo plazo se convierten en covers que realizan los estudios profesionales y si, es dinero, pero artísticamente un tatuador no se siente realizado tapando el trabajo de otro.

No tengas prisa. Llevas años sin ese tatuaje, puedes esperar unos meses más. Merecerá la pena.

Buen día!